Programa Creciendo Juntos busca fortalecer los lazos afectivos entre la mujer y sus hijos.
Hasta este martes se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna. Justamente con la finalidad de proteger el amamantamiento del recién nacido es que doce internas, que esperan una sentencia o ya fueron condenadas, se mantienen en establecimientos penitenciarios de la región de Valparaíso junto a sus bebes menores de dos años, esto en el marco del programa Creciendo Juntos.
Son dos las unidades de la región que pueden acoger a mujeres embarazadas o con bebés recién nacidos. Se trata del Complejo Penitenciario de Valparaíso y el Centro de Detención Preventiva de Quillota, recintos que en la actualidad tienen a ocho y doce internas en esta situación, respectivamente.
En el caso de la unidad quillotana, el encargado local de Creciendo Juntos, Héctor Rivera, sostuvo que: “El Programa se encuentra especialmente segmentado del resto de la población. De hecho cuenta con un espacio acondicionado especialmente para la permanencia de las mujeres embarazadas o con hijos lactantes. Mientras están en el programa les brindamos todo el apoyo asistencia| en torno a su bienestar, esto quiere decir: alimentación, abrigo y salud para que puedan estar en las mejores condiciones. Paralelamente los vamos incorporando a distintos espacios de intervención socio-familiar para ir fomentando y potenciando el vínculo afectivo”.
El asistente social agregó que los lactantes asisten al control Niño Sano, por medio del Cesfam Silva Henríquez, y están incorporados en la red comunal del programa Chile Crece Contigo. Esto permite que, además de los controles de salud, asistan a espacios de estimulación. Por su parte las madres, de ser necesario, pueden ser derivadas a centros de tratamiento de adicciones.
Francisca Torrealba es una de las reclusas que forma parte del programa Creciendo Juntos. Hace ocho meses la joven de 21 años ingresó al CDP de Quillota, donde tuvo a su bebé que tiene apenas un mes y medio.
“Es primera vez que estoy detenida y no sabía que existía este lugar y es súper cómodo, pero igual difícil porque uno se apega a su bebé y a los dos años tiene que llevarlo para la calle. Las habitaciones de nosotros son muy diferentes a las del resto de las internas. Son tres camas en cada pieza, hay donde ducharlos, hay espacios para que ellos estén, hay closet. Gracias a Dios no nos falta nada aquí”.
Francisca, quien se encuentra privada por primera vez, reconoce que es recurrente el pensar en el día que tenga que separarse de su hijo. Si bien la abuela paterna se haría cargo de él, la joven reconoce que: “Uno queda mal, porque como uno va a querer mandar a un hijo a la calle, sin saber que le puede ocurrir. No va a ser lo mismo que esté con su madre”.
REGIÓN
El programa Creciendo Juntos, el cual nace en el año 2017, posee dos líneas de trabajo. La primera de ellas engloba a las mujeres embarazadas o con lactantes y en la actualidad son 20 las personas que forman parte de ésta; la segunda se preocupa de los hombres y mujeres privados de libertad que tienen hijos de hasta doce años.
En el caso de la segunda línea de intervención, Zorka Fuentes Vazón, encargada regional de la iniciativa gubernamental, sostuvo que se efectúa una “intervención, a través de talleres grupales y el objetivo es desarrollar las capacidades y habilidades relacionadas con la parentalidad positiva. Respecto a la según línea, tenemos un total, al mes de julio, de 60 internos e internas: 19 del Complejo Penitenciario de Valparaíso, 20 del CDP de Quillota y 21 del CCP (Centro de Cumplimiento Penitenciario) de San Antonio”.
Con motivo de la celebración de la semana de la lactancia, se realizó una charla sobre esta temática a las mujeres embarazadas o con lactantes del establecimiento penitenciario de Quillota. La encargada de la actividad fue Alicia Mena, nutricionista y asesora de lactancia de la ONG Cría Amor.