Por: Fernando Pérez Gallegos / Profesor
Nuestro país está en una dinámica de cambios y reformas lo que significará que la ciudadanía en general pueda percibir a corto, mediano y largo plazo los beneficios que hoy la mayoría del país espera.
Se confía en que los pasos dados sean ejecutados con la sapiencia, energía y convencimiento que los chilenos demandan.
Los elementos esenciales para el logro de tan ansiadas metas suponen que deben ser enmarcados en un clima de tolerancia política, en que el respeto irrestricto a las diferentes convicciones ideológicas deben ser el permanente actuar de quienes por el poder otorgado por el pueblo deben ejercer, de igual forma de quienes hoy se encuentran en el lado opuesto de quienes gobiernan.
Se requiere comprensión y respeto por el trabajo de implementación de políticas públicas; las formas y métodos son herramientas fundamentales para que las iniciativas tengan buenos resultados.
El tener ideas divergentes no debe ser motivo de escarnio, insulto, denostar, maltrato físico o emocional , sino que debe primar la correcta convivencia social . En términos simples me refiero a la convivencia ciudadana democrática, en que a pesar de nuestras diferencias, lo que debe prevalecer es el espíritu de colaboración, diálogo y compromiso por los caminos adoptados para conseguir el bien común.
Las Políticas Públicas son generalmente expresión de los niveles de participación, movilización y lucha social de la sociedad civil dentro de los mismos marcos sociales que nos entrega la Democracia que un país entero se pronunció un 5 de Octubre de 1988 en un Plebiscito y que a partir de esa gesta ciudadana, se ha construido un país que sin estar exento de errores , dificultades y temores en su nuevo rumbo , se ha avanzado mucho camino, pero quedando pendientes tareas que hoy con convicción y apoyo de la mayoría de los chilenos se llevan adelante.
Las nuevas generaciones deben entender que la lucha por tener justicia social, respeto por los Derechos Humanos, un nuevo Estado que tenga responsabilidad en las necesidades esenciales del ser humano, un sistema político que muestre a la ciudadanía transparencia y honestidad en sus actos, es urgente acometerlos a través de una construcción que se debe realizar con respeto, tolerancia y participación, de tal forma que las grandes aspiraciones de nuestra sociedad se logren en un marco de bienestar social que permita cimentar un futuro que asegure esperanzas de nuevos tiempos para las nuevas generaciones de chilenos, aplicando la correcta justicia a quienes no entienden que la construcción de un país requiere de hombres y mujeres que ingresen a la vida pública se va a servir al prójimo y a no a buscar honores ni beneficios , la limpieza de actos corruptos, castigar la compra de conciencias de quienes deben legislar para todos los chilenos, son medidas esenciales que buscan conformar un país con más justicia social y solidario que permita a cada chileno mirar con fe el futuro.-
