Fundación Banigualdad acompaña a más de 4.500 emprendedores en la región, de los cuales más de 2.000 son madres que combinan el emprendimiento con el cuidado de sus familias.
En la Región de Valparaíso, la fuerza y el compromiso de miles de mujeres emprendedoras se refleja en números contundentes: más de 4.500 personas impulsan sus propios negocios, de las cuales alrededor de 3.500 son mujeres y más de 2.000 son mamás que buscan generar ingresos desde casa, cuidando de sus hijos y construyendo un futuro mejor.
Fundación Banigualdad ha sido un pilar fundamental en este proceso, entregando apoyo financiero, capacitación y acompañamiento personalizado que permite a estas mujeres enfrentar los múltiples desafíos que implica emprender en contextos complejos.
Una de estas mujeres es Angie Uribe, quien vive en Villa Alemana y con su emprendimiento ha logrado transformar dificultades en oportunidades. Angie tiene 43 años y es madre de Martina, una niña que ha sido el motor que la impulsa cada día. “Llegué a Fundación Banigualdad con mi hija en brazos, buscando una forma de salir adelante sin descuidar a mi familia”, recuerda.
Su historia está marcada por la valentía y la esperanza. Comenzó vendiendo productos para bebés hechos por ella misma: cojines de lactancia, sábanas y pañaleras. Luego, abrió una verdulería en la casa de su abuelo, a quien cuidaba con mucho cariño. Pero en 2017, la partida de su abuelo fue un duro golpe y el 2018 estuvo marcado por un nuevo desafío: el diagnóstico de artritis idiopática juvenil sistémica de Martina, enfermedad que la obligó a poner su vida laboral en pausa para dedicarse al cuidado de su hija.
“Ha sido muy difícil, ver a mi hija sufrir y no saber qué pasará. A veces siento que no puedo más, pero ella es mi motor para seguir adelante”, confiesa Angie con emoción.
A pesar de las adversidades, Angie encontró en el emprendimiento una forma de mantenerse activa y generar ingresos. Durante la pandemia invirtió el crédito que recibió de Banigualdad en una máquina para estampar mascarillas y ropa, lo que le permitió ampliar su negocio y contratar a otras mujeres. “Fue el mejor año de mi emprendimiento”, señala.
Hoy, con Martina retomando poco a poco su vida social y escolar, Angie continúa su trabajo en estampados, sublimación y confección de ropa escolar, con la ilusión de seguir creciendo y llegar a más clientes. Además, forma parte de un grupo de emprendedoras de Banigualdad que la sostiene y acompaña, compartiendo experiencias y aprendizajes.
La historia de Angie es solo un reflejo del impacto que Fundación Banigualdad tiene en la Región de Valparaíso, donde cada día más mujeres encuentran en esta organización una oportunidad real para desarrollar sus proyectos y lograr independencia económica, sin dejar de lado su rol de madres y cuidadoras.
Con más de 4.500 emprendedores apoyados en la región, Banigualdad sigue impulsando un cambio social, fomentando la autonomía, dignidad y esperanza en miles de hogares.
Si eres emprendedor o emprendedora, y buscas apoyo para hacer crecer tu negocio, te invitamos a postular en www.banigualdad.cl.