Por: Hugo Pérez White
El haber ejercido durante 6 años consecutivos como jefe de gabinete de dos alcaldes en la comuna de Coyhaique me permitió conocer de cerca las diversas instancias que esta función significa para las personas que optan al servicio público en una determinada comunidad.-
Una de ellas es el estrés que produce la multiplicidad de problemas que se deben resolver minuto a minuto, la enorme cantidad de documentos que debe revisar y estampar la firma correspondiente como Alcalde, la cual es resolutiva a cada gestión, máxime cuando ello implica la utilización de recursos que de alguna manera pertenecen por la vía indirecta a todos los contribuyentes y como es cargo de representación popular debe estar dispuesto a recibir y escuchar a todas las personas que desean intercambiar opiniones con su máxima autoridad comunal por lo cual las agendas diarias permanecen día a día recargadas de entrevistas.-
La carga emocional que significa esta alta responsabilidad es altísima y el ánimo no puede decaer nunca, ni aún en las más difíciles situaciones en que deba intervenir dentro del plano de la ecuanimidad y la justicia.-
Un Alcalde es un comunicador por excelencia y debe estar en su conocimiento todo lo que sucede en su territorio jurisdiccional ya que los informes llegan por distintas vías a su entorno y por ende debe tener a su disposición el mayor número de antecedentes que sus asesores le proporcionan para que decida con la mayor eficiencia ya que las atribuciones que tiene un Alcalde son amplísimas y nadie más que él, puede tomar decisiones con la excepción que algunos de sus proyectos sean rechazados por mayoría en el Concejo municipal, organismo colegiado que tiene algunas atribuciones y la más visible es el cumplimiento de la labor fiscalizadora del uso adecuado de los recursos.-
Un alcalde ejerce a cada instante las funciones de relacionador público ya que la cantidad de invitaciones que recibe de parte de todas las instituciones para que asista a reuniones de asambleas inauguraciones de obras públicas, actos ceremoniales, invitaciones a aniversarios de diversas instituciones, actos y veladas en los colegios y liceos, son alguna de estas actividades que debe cumplir con la solemnidad que su presencia significa en dichos actos, los cuales a veces son de larga duración que escapan a sus horarios normales de trabajo en su corporación, aparte de los continuos viajes nacionales e internacionales a los que muchas veces está obligado a concurrir.-
Como primera autoridad comunal debe ser puntual en sus apariciones públicas, conducta intachable en las relaciones interpersonales, claro y explícito con los medios de comunicación y objetivo en sus apreciaciones políticas y velar las 24 horas del día por la seguridad de sus vecinos.-
Como se puede apreciar las labores comunitarias de un Alcalde es intensa y de compromiso con la gente y la comuna que representa, debe ser de una entrega total y muchas veces despreocupándose de su entorno más íntimo, su familia y por eso todos los Alcaldes del país merecen una consideración especial para con su primera autoridad.-